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No siempre es fácil saber si un niño tiene sobrepeso. Los niños crecen a diferentes ritmos y en diferentes momentos. Además, la cantidad de grasa corporal de un niño cambia con la edad y depende de si es niño o niña. En cualquier caso y del mismo modo que sucede en los adultos, el IMC (Índice de Masa Corporal) es la forma habitual de saber si nuestro hij@ tiene sobrepeso, la única diferencia es que el IMC de los niños es específico para la edad y el sexo (ver calculadora de IMC) no obstante lo recomendable es que sea el pediatra quien valore el grado de sobrepeso del niñ@. Si mi hij@ tiene sobrepeso  ¿debería preocuparme? Nos gustaría decirte que “no te preocupes, está creciendo, ya cambiará “ etc… pero lo cierto es que sí debes preocuparte si tu hij@ tiene sobrepeso. El exceso de peso no es bueno para la salud en ninguna etapa de nuestra vida. Además, el problema del sobrepeso es acumulativo: cuanto más tiempo se tiene sobrepeso más difícil es deshacerse de él. Por si los argumentos anteriores no fuesen suficientes, a corto plazo, por ejemplo, es posible que tenga problemas para respirar o dolor en las articulaciones. Algunos niños pueden desarrollar problemas de salud, como diabetes tipo 2, presión arterial alta y colesterol alto y desgraciadamente están más expuestos a experimentar burlas relacionadas con su peso lo que acaba dañando la autoestima. ¿Cómo puedo ayudar a mi hijo a desarrollar hábitos saludables? Los padres son el primer ejemplo de hábitos saludables en relación a la alimentación, hábitos de sueño, estilo de vida y practica de actividad física. El primer paso es conseguir un cambio de hábitos alimenticios y de estilo de vida en el hogar. A partir de ahí, hay otras formas de ayudar a su hijo a desarrollar hábitos saludables: Hablar con nuestro hijo sobre salud. Sobre qué puede hacer para estar sano y ayudarle a saber identificar y tomardecisiones saludables. Hablar sobre cómo las actividades físicas y ciertos alimentos y bebidas pueden ayudar a sus cuerpos a fortalecerse y mantenerse saludables. Los niños deben realizar al menos una hora de actividad física. Evita que sus actividades de ocio sean sedentarias Involucra a toda la familia en la creación de hábitos saludables de alimentación, bebida y actividad física. Asegúrate de que tu hij@ duerma lo suficiente pues el dormir poco predispone al sobrepeso. Propicia hábitos saludables como comer toda la familia en la mesa sin otro tipo de distracciones (tele, móvil, etc..) procurando saborear los alimentos y fomentando hábitos saludables como el masticar bien. Y por supuesto, poniéndote en manos de especialistas en nutrición pediátrica. En Gastrum somos ofrecemos soporte y acompañamiento a familias en materia de Nutrición Pediátrica. La Dra.María Morales, miembro de nuestro equipo médico, es Dietista/Nutricionista especializada en nutrición infantil. Contacta con nosotros para que podamos desarrollar un plan de alimentación saludable que permita modificar los hábitos alimenticios de tu hij@ antes de que sea demasiado tarde....

La obesidad infantil no ha hecho más que crecer en las últimas décadas. En la actualidad, en Andalucía, a pesar de que en los últimos años se ha estabilizado, tres de cada diez niños tienen problemas de sobrepeso y obesidad. ¿Cuáles son los riesgos para la salud de los niños con obesidad? Riesgos psicosociales El niño o adolescente con sobrepeso puede ser objeto de burlas desde una edad temprana y puede sentirse socialmente excluido. Esto puede provocar una disminución de la confianza en uno mismo (especialmente en los adolescentes), un alto riesgo de problemas de conducta, abandono escolar o dificultades de aprendizaje. La ansiedad, el rechazo y la baja autoestima también pueden estar en el origen de conductas adictivas o trastornos alimentarios (TDA) que contribuyen al agravamiento de la obesidad. Riesgos médicos Además no deben pasarse por alto las consecuencias físicas a largo plazo. Los niños obesos tienen más probabilidades de seguir siendo obesos hasta la adolescencia y la edad adulta. Luego se exponen a varias enfermedades, según la edad a la que se desarrolló la obesidad y su duración: -riesgo de resistencia a la insulina (a menudo una señal de advertencia de diabetes) -aumento del riesgo de anomalías en el colesterol y / o triglicéridos en sangre -mayor riesgo de hipertensión o asma, -mayor riesgo de trastornos del sueño (apnea obstructiva del sueño, ronquidos, somnolencia, despertares nocturnos), riesgo de trastornos musculoesqueléticos (dolor, etc.), -mala tolerancia al ejercicio (dificultad para respirar, etc.). Aemás, en la edad adulta corre el riesgo de sufrir complicaciones cardiovasculares y un mayor riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer (cáncer de endometrio, cáncer de mama o cáncer de colon). El exceso de peso también tiene consecuencias morfológicas y estéticas (estrías, ginecomastia, sudoración excesiva, etc.) que pueden ser fuente de sufrimiento físico y psicológico para niños y adolescentes. ¿Mi hijo es obeso? ¿Debo ponerlo a dieta? A dieta como tal no!. Lo que se debe hacer, con la ayuda de especialistas en nutrición, es fomentar el cambio de hábitos alimenticios hacia uno más saludable y por supuesto incentivar la práctica de ejercicio físico. Uno de los principales factores de las cifras de obesidad infantil actuales es la falta de ejercicio físico.   En Espacio Gastrum apostamos por la nutrición pediátrica y por la reeducación nutricional tanto del niño como de su entorno para cambiar los comportamientos alimentarios que se han instaurado y que distan mucho de una conducta saludable. Solicita cita informativa gratuita sin compromiso....